San Francisco Javier

Francisco nació en 1506, en el castillo de Javier en Navarra, cerca de Pamplona, España. Era el más pequeño de la familia.

 

A los 18 años fue a estudiar a la Universidad de París, en el colegio de Santa Bárbara. Allí tuvo como compañero de habitación a Pedro Favre, que sería jesuita como él y luego beato.

 

Llegó a ser uno de los siete primeros seguidores de San Ignacio, fundador de los jesuitas, consagrándose al servicio de Dios. Hicieron voto de pobreza absoluta, y decidieron ir a Tierra Santa para comenzar ahí su obra misionera poniéndose a disposición del Papa.

 

El sufrimiento de los nativos se convirtió en lo que el describía “una espina que llevo constantemente en el corazón”.

 

Misionó en Mozambique (África), la India, Japón, China y las Islas Molucas. Solía acercarse a los niños, a quienes divertía repetir a los demás lo que acababan de aprender de los labios de Francisco.

 

Son pocos los hombres que tienen el corazón tan grande como para responder a la llamada de Jesucristo e ir a evangelizar hasta los confines de la tierra.  San Francisco Javier es uno de esos.  Con razón ha sido llamado: "El gigante de la historia de las misiones" y el Papa Pío X lo nombró patrono oficial de las misiones extranjeras y de todas las obras relacionadas con la propagación de la fe.

 

Francisco Javier fue canonizado en 1622 . Su cuerpo se encuentra incorrupto.

 

Su fiesta se celebra el 3 de diciembre